Probamos la última integrante del line up de la marca china Maxus, la camioneta T90, una muy interesante aproximación al segmento premium entre las pick ups, con uno de los motores con mayor torque del mercado y una carga tecnológica que sorprende.
El 2021 fue un año marcado por la feroz competencia entre camionetas que se dió en el mercado nacional de vehículos livianos. Varios destacados estrenos, como Peugeot Landtrek se complementaron con la agresiva oferta de las marcas chinas, como el caso de Maxus que lanzó su pick up mediana T90, que se posiciona por su tradicional T60. La Maxus T90 es una camioneta más poderosa, muy bien equipada y que se posiciona en el difícil y extremadamente competitivo nicho de las mid size pick ups, con un foco de experiencia de usuario premium, un nicho cada vez más atractivo que se posiciona entre el trabajo y las flotas, hasta el uso recreativo. Un diseño diferenciador es uno de sus argumentos a primera vista. Maxus T90 destaca en ello, con un frontal llamativo, en cromado, con el logo de la marca en el centro. Muestra dinamismo con sus aguzados focos, marcados pasos de rueda con molduras que resalta su carácter off road. Su caja de carga se convierte en un diferenciador, con un portalón trasero llamativo, con el logo de la marca y molduras en resina, con un juego con líneas rojas que generan una integración con las luces traseras. Diferenciador y atractivo, no deja de llamar la atención.
INTERIOR TECNOLÓGICO
Una de las experiencias que la Maxus T 90 es capaz de ofrecer y marca las mayores diferencias es su interior, por la calidad, pero principalmente por la alta cantidad de tecnología desplegada. El conductor recibe la información de la operación, en doble pantalla de alta resolución: la primera que reemplaza al cuadro de instrumentos; mientras que la segunda -ubicada en la consola central, es la interfaz para los servicios, como climatizador, sistema de entretenimiento, comunicación, navegación y funciones del vehículo, además de pantalla para sus cámaras y diagnóstico de funcionamiento. Respuesta rápida y buen diseño de la experiencia de usuario, la ponen en un alto nivel en experiencia premium. Asientos tipo butacas deportivas, con controles eléctricos, en cero y con calefacción, volante multifunción y calefaccionado de cuero, panel de instrumentos digital de 10” y pantalla táctil de 12” con Apple Carplay integrado y sistema QD Link para vincularse a equipos con sistema Android, además de climatizador automático, keyless entry y botón de encendido, y control crucero solo suman a la experiencia premium que propone. ALTO PODER DIÉSEL Maxus T90 se mueve gracias a un sorprendente motor diésel, de 2.0 litros, con doble turbo de geometría variable (VGT), que provee de un excelente nivel de potencia de 215 caballos de fuerza, con abundantes 500 Nm de torque, que le permiten a la T90 mostrar gran solvencia frente a caminos difíciles y situaciones off road. En nuestra unidad de prueba, la potencia y torque son administradas por una transmisión automática de ocho relaciones. En seguridad ofrece seis airbags, monitor de presión de neumáticos, control de estabilidad y sistemas ABS-EBD-EBS, además de sensores y cámara de retroceso, asistente de inicio de pendiente y control de descenso. También cuenta con detector de fatiga del conductor, sistema que analiza si el piloto se encuentra en condiciones óptimas para conducir, alertando con anticipación para dejar detener la marcha y así evitar poner en riesgo la integridad de los ocupantes o peatones. Dentro del equipamiento exclusivo para la versión AT, encontramos freno de estacionamiento eléctrico y el sistema Auto Hold, que mantiene detenido el vehículo de forma automática, sin la necesidad de que el pie esté en el freno.
SENSACIONES MAXUS
Con un alto despliegue tecnológico, un motor diésel de alto torque, y una caja automática, al volante de la Maxus T90 es posible percibir de inmediato la alta torsión del motor con la fuerza que se expresa en las primeras marchas de su transmisión.
Esta fuerza es tan abundante, que puede parecer que tiene un pequeño lag en su salida, pero no es nada más que el traspaso de los poderosos 500 Nm que se traspasan a sus ruedas. Con mayor presión en el acelerador, la Maxus T90 es ágil en acelerar, y las evoluciones de la caja pasan suaves, sin transiciones notorias, a pesar de la enorme torsión que soporte su cadena de poder. Una dirección muy precisa, entrega gran control gracias a una excelente suspensión, que es un punto flaco dentro del nicho de las camionetas medianas. En el caso de Maxus T90 es confortable, incluso en las plazas traseras y sin carga, algo poco común. Este mismo trabajo en la suspensión, unido a su sistema de control de tracción y estabilidad, disminuye casi a cero el coleteo característico de las pick ups sin carga, en terrenos de baja adherencia. Cuenta con un sistema 4×4 de accionamiento electrónico, con modos de tracción trasera, doble tracción alta y baja. Es de fácil operación y, con la caja automática muy fácil de controlar en términos de torsión frente a la marcha pasada. Es decir no baja de revoluciones ante mayor demanda de tracción. Es tal la eficacia de sus 500 Nm de torque, que en muchas situaciones con camino complejo, basta mantener el ralentí conectado para contar con la fuerza suficiente para superar los obstáculos. Una experiencia premium, y muy tecnológica para una camioneta que se posiciona muy cerca de las grandes pick ups, en términos de experiencia, y que cuenta con uno de los motores con mayor poder y torsión en su categoría.